EL CORAZÓN ROBADO, poema de Arthur Rimbaud
Mi triste corazón babea a popa,
mi corazón lleno de tabaco:
sobre él arrojan escupitajos,
mi triste corazón babea a popa:
bajo las burlas de la tropa
que suelta una risotada general,
mi triste corazón babea a popa,
¡mi corazón lleno de tabaco!
¡Itifálicos y sorchescos
sus insultos lo han depravado!
En la velada narran relatos
itifálicos y sorchescos.
¡Oleajes abracadabrantescos,
tomad mi corazón, salvadlo!
¡Itifálicos y sorchescos
sus insultos lo han depravado!
Cuando sus chicotes hayan cesado,
¿cómo actuar, oh corazón robado?
Se oirán estribillos báquicos
cuando sus chicotes hayan cesado:
tendré sobresaltos estomáquicos
si degradan mi triste corazón.
Cuando sus chicotes hayan cesado,
¿cómo actuar, oh corazón robado?
(Traducido por Juan Abeleira. Rimbaud. Poesías y otros textos. Hiperión, Madrid, 1995 (Nueva edición revisada).
Libros de Arthur Rimbaud
[amazon_link asins=’8467047801,8420683590,849104597X,8437614651′ template=’ProductGrid’ store=’narrativacom-21′ marketplace=’ES’ link_id=’11a1d6d2-08bd-11e8-9305-d13b3c7e7655′][amazon_link asins=’8467047801,8420683590,849104597X,8437614651′ template=’ProductGrid’ store=’narrativacom-21′ marketplace=’ES’ link_id=’11faf2d2-08bd-11e8-9b0b-67c76680502c’]
Libros de Luis Antonio de Villena
[amazon_link asins=’8416906629,8475226752,8494772910,8467036567′ template=’ProductGrid’ store=’narrativacom-21′ marketplace=’ES’ link_id=’460bce08-08bd-11e8-8cb5-fbf6dcb80a2c’]
Esta mal traducido:
Mi triste corazón babea a popa,
mi corazón lleno de caporal:
le escupen chorros de sopa,
mi triste corazón babea a popa:
entre las burlas de la tropa
que suelta una risa general,
mi triste corazón babea a popa,
mi corazón lleno de caporal.
Itifálicos y soldadescos,
sus insultos lo han depravado.
Por la tarde dibujan frescos
itifálicos y soldadescos.
Oleajes abracadabrantescos
que mi corazón sea salvado.
Itifálicos y soldadescos,
¡sus insultos lo han depravado!
Cuando los soldados hayan acabado,
¿cómo actuar, oh corazón robado?
Se oirán estribillos báquicos
cuando los soldados hayan acabado.
Tendré ataques estomáquicos
si mi triste corazón es humillado:
cuando los soldados hayan acabado,
¿cómo actuar, oh corazón robado?
Con su vida posterior se puede decir que Rimbaud hizo una enmienda a la totalidad a su etapa literaria.
O, por lo menos, parcial.