
LAS PAREDES DE MI CASA
Antonio Flores Schroeder
(microrrelato)
Soledad deambula en cada uno de los rincones de la casa y con toda la calma de la tarde, camina en el laberinto de mi recámara donde rasga las paredes con una navaja suiza que un día encontró debajo de la almohada. A veces, cuando la madrugada anuda la voluntad y duermo en la banqueta de una mujer sin memoria, Soledad escribe frases hirientes en la puerta del baño.
Pone anuncios en el clasificado en busca de dulces hogares, cuerpos mutilados y disgustos gratis. Por supuesto que, esto encabrona a cualquier persona.
Borrar tantos presagios y reclamos puede llevar a la ruina, inclusive a la tumba.
Uno tiene que subir al auto, manejar por la avenida principal y encontrar semáforo tras semáforo a niños que ofrecen chicles de una infancia perdida y semillas de un futuro que no germinará.
Giras hacia la izquierda, a la derecha, retomas el centro y buscas un estacionamiento libre de malaria para ingresar al supermercado con la desesperación en las manos. Ahí caminas y escuchas cómo los envases de cristal que están en todos los pasillos se estrellan y esos ruidos, que suelen provocar otros ruidos, dispersan tus ideas y en ese instante te reencuentras frente a los botes de pintura. Regresas por los mismos pasillos del alfabeto de marcas y, otra vez, los cristales caen al piso y llegas hasta la cajera que te hace una cara de yo no fui, y empiezas una gran discusión con temas tan irrelevantes como la paridad del peso frente al dólar. Subes al vehículo y sientes nostalgia por tu casa, aceleras y recorres días y noches y en esas quimeras, descubres que tú casa no volverá ser el hogar que alguna vez fue.
Después de una semana regreso a casa y como si fuera ayer, abrazo a Soledad, le invito un café y una cerveza para volver a pintar las paredes de blanco y si bien me va, podré dormir junto a ella, dibujar sobre su espalda una imagen abstracta de algún sueño, como siempre pensando que le hago el amor.
Antonio Flores Schroeder. Escritor y periodista. Nació en Chihuahua en 1975. Es autor de la novela Oriana (Conaculta, Pacmyc, 2011) y Personajes de una ciudad sitiada (Universidad de Nuevo México en Las Cruces, EU). Fundador del movimiento Escritores por Ciudad Juárez.