
Recibo numerosas peticiones de grandes amantes de la lectura, por lo general estudiantes, que pretenden que les resuma algún cuento que han leído en mi blog. Hablo de cuentos que a veces no alcanzan las dos páginas… Se entiende mal tanta pereza: si calculamos las palabras que deben escribir cuando redactan el email que luego me envían y las que leerían en caso de que yo hiciera la sinopsis, concluiríamos en que gastarían menos energías si leyeran el relato entero.
Estas peticiones deberían suponer un baño de humildad para los escritores: incluso los más célebres autores son susceptibles de ser reducidos a medio folio. De nada sirve pensar en el tiempo, el talento o el grado de introspección que necesitaron los Borges, Cortázar, Denevi, Carver o Poe de turno para escribir sus narraciones breves: para muchos estudiantes no son más que unos pelmazos incapaces de escribir sus cosas en menos de 140 caracteres.
El ciudadano del siglo XXI lo quiere todo resumido: saber si el pequeño de la casa, que ya apunta maneras, será el próximo Beethoven o el nuevo Cristiano Ronaldo; estar al corriente del futuro tras una efímera sesión con un vidente al calor de los posos del café; conocer el tiempo de los quince días venideros consultando una aplicación…
De nada sirve quejarnos de la querencia a la literatura abreviada: hoy día todo se pretende abreviado. Se abrevia también el lenguaje en los teléfonos móviles, cuyas palabras hay que mancillar por bien de la modernidad.
Nunca respondo a estos emails. Es mi forma abreviada y educada de decirle a estos perezosos que se las arreglen solos.
(Artículo publicado en El Periódico Extremadura el miércoles, 26 de agosto de 2015).
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Francisco Rodríguez Criado: escritor, corrector de estilo, profesor de talleres literarios y creador del blog Narrativa Breve. Ha publicado novelas, libros de relatos, obras de teatro y ensayos novelados. Sus minificciones han sido incluidas en algunas de las mejores antologías de relatos y microrrelatos españolas: El cuarto género narrativo. Antología del microrrelato español (1906-2011). Ed. Irene Andrés-Suárez (Cátedra, Madrid, 2012),Velas al viento. Ed. Fernando Valls (Los cuadernos del vigía, Granada, 2010), La quinta dimensión (Universidad de Extremadura, Mérida, 2009), Soplando vidrio y otros estudios sobre el microrrelato español. Ed. Fernando Valls (Páginas de Espuma, Madrid, 2008), Histerias breves (El problema de Yorick, Albacete, 2006), Relatos relámpago (ERE, Mérida, 2006), etcétera. Es autor de El Diario Down, donde narra en primera persona sus experiencias como padre de un bebé con el Síndrome de Down.
Email: info@narrativabreve.com
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Pues bien hecho. La paciencia se cultiva, más les vale a los chavales empezar a trabajarla ya, serán y nos harán más felices.Basta ver la forma en que se denosta la palabra en whatsapp y demás redes sociales, a dónde va la expresión escrita.
Un saludo.
Sete.
Por supuesto que el teléfono móvil, el ordenador y la televisión tienen que ver con esa pereza que acusan los jóvenes en la actualidad. Son un culto al menos esfuerzo.