La encrucijada. Un cuento de Bioy Casares
En cuanto a mi amiga, declaro que nunca estuvo tan linda, ni tan alegre, ni tan dulce. Esto no tendría nada de extraordinario si la pobre durmiera bien; pero el aire de mar, aunque el de aquí no es el de Mar del Plata, la desvela y noche a noche toma pastillas. Los muchachos del Richmond me habían asegurado: «Hay que viajar solo. Si cargas con mujer, acabas loco y aborreciéndola». Que haya ventajas en viajar solo, no lo niego; pero a lo largo del itinerario —y no es poco lo recorrido antes de llegar a Saint-Tropez— nunca tuve ganas de librarme de Amalia.
Cuento de Borges: La intrusa
En “La intrusa”, de Jorge Luis Borges, disfrutamos de la historia de dos hermanos (apellidados Nelson) y de una mujer que tuvo gran importancia en la vida de ambos.
La historia se narra a partir del entierro de Eduardo, uno de los dos hermanos.
“La intrusa”, de Borges, forma parte del libro de relatos El informe de Brodie, publicado en 1970.
¿Por qué muchas personas prefieren el bolígrafo a la pluma estilográfica?
Aunque ambas herramientas de escritura, la pluma de escribir y el bolígrafo, tienen sus ventajas y desventajas, hay varias razones que explican por qué los bolígrafos son la elección preferida de muchas personas en la vida cotidiana, pese a la elegancia y la tradición que representa una pluma estilográfica.
Solo para fumadores. Un cuento de Julio Ramón Ribeyro
Sin haber sido un fumador precoz, a partir de cierto momento mi historia se confunde con la historia de mis cigarrillos. De mi período de aprendizaje no guardo un recuerdo muy claro, salvo del primer cigarrillo que fumé, a los catorce o quince años. Era un pitillo rubio, marca Derby, que me invitó un condiscípulo a la salida del colegio.
Anécdotas del fútbol | Guillermo Jiménez
–Enric González en su libro Historias del calcio cuenta que Francesco Totti, eterno capitán de la Roma, llegó a escribir un libro de cuentos titulado Todos los chistes sobre Totti (contados por mí mismo). El ex futbolista tenía fama de “simpático descerebrado” y de cateto. Uno de los chistes del libro que dicen, lo define, es el que sigue: “Aparece una noticia en los diarios: Incendio en la biblioteca de Totti, destruidos los dos libros. Totti está desesperado, aún no había terminado de colorear el segundo”.
Un cuento filosófico: Así es la vida (Miguel Bravo Vadillo)
Hoy, para mí, es un día de trabajo como otro cualquiera; es decir, de trabajo por el que no percibo ni una mísera moneda, ya que nunca he logrado vender uno solo de mis cuentos. Al menos, Ana –que así se llama mi encantadora esposa– gana algún dinero con un empleo a media jornada que apenas nos alcanza para pagar las facturas. Mal que bien, y apretándonos el cinturón más de lo aconsejable para nuestra salud física y psíquica, logramos llegar a fin de mes.