Ricitos de oro. Cuento infantil

Ricitos de oro, cuento infantil

Un día de primavera, paseando por el bosque, se alejó de donde vivía por un camino que no era el habitual. Cuando menos se lo esperaba, se encontró de frente con una preciosa casita de paredes azules y ventanas adornadas con rojos geranios. Era tan linda que parecía una casa de muñecas.

Relato corto de Javier Santos Rodríguez: Pase al frente

relato corto argentino

Las consecuencias devastadoras de la última guerra… No. Así no debería empezar. Pensá. Pensá. A ver de este otro modo: Las consecuencias terribles y devastadoras en las que el mundo se sumió después de la última guerra fueron por lo mismo orgánicamente devastadoras. No…, mejor cambio orgánicamente por sistemáticamente. Las consecuencias terribles y devastadoras en las que el mundo se sumió rotundamente después de la última guerra fueron sistemáticamente devastadoras…

Cuento infantil «La cajita con números» (Emilia León Vargas de Coto)

cuento infantil

Son las once de la mañana, así que vamos a comenzar con el número que sigue, el doce. A las doce de la noche nació el Niñito Dios, y cada veinticuatro de diciembre, al dar los relojes las doce campanadas, vuelve a renacer la alegría que nos trajo hace más de dos mil años. Como el Niñito no necesita regalos, él dijo que nosotros en la Tierra nos demos regalos, y a los niños juguetes para conmemorar la fecha.

Cuento navideño de Truman Capote

cuento navideño de Truman Capote

Ernesto Bustos Garrido nos ofrece un cuento dentro de otro cuento del escritor norteamericano Truman Capote (1924–1984), uno de los grandes autores norteamericanos del siglo XX. Lo que podéis leer a continuación es un fragmento (aunque constituye una historia en sí misma) que forma parte del cuento «Recuerdo navideño», incluido en el libro de Truman Capote Tres cuentos (Anagrama, 1996).

Sigue leyendo

narrativa_newsletterp

3 microrrelatos sobre el colegio

Tres microrrelatos sobre el colegio

Miguel Bravo Vadillo nos entrega tres microrrelatos que se desarrollan en las aulas de un colegio. Tres cuentos con niños que unas veces escuchan las explicaciones del profesor y otras veces desafían a este -aun sin querer- con sus dudas y preguntas.

Microrrelato: CIENCIA Y RELIGIÓN

–Una visión académica–

El profesor de religión pide a sus alumnos que busquen la definición de «Dios» en el diccionario de la Academia. Un alumno lee la definición: «Nombre sagrado del Supremo Ser, Criador del universo, que lo conserva y rige por su providencia». Bien, dice el profesor, ¿qué significa eso? Nadie contesta. Pues eso significa, aclara el profesor, que Dios existe; porque si no existiera, la Real Academia (que limpia, fija y da esplendor) nunca lo hubiese definido. A ver, busquen ahora la definición de «teología». Un alumno lee: «Ciencia que trata de Dios y de sus atributos y perfecciones». Efectivamente, dice el profesor: «ciencia que trata de Dios». ¿Y cómo podría tratar de Dios si Dios no existiese? No es necesario que contesten. Por otra parte, y como bien dice la Real Academia, se trata de una ciencia. ¿Qué quiere decir esto? Muy sencillo: que en el estudio de Dios los teólogos emplean métodos científicos. A ver, que alguien lea la definición de «ciencia». Un alumno lee: «Conocimiento cierto de las cosas por sus principios y causas». Exacto, ratifica el profesor, «conocimiento cierto». Es decir, que no deja lugar a dudas. Quizá ustedes han entrado hoy en esta clase pensando que ciencia y religión eran incompatibles, pero ya ven que no lo son; así que saldrán de ella siendo un poco más sabios.

Sigue leyendo

narrativa_newsletterp

Cuento infantil de Rossi Vas: Por una patata cruda

Rossi Vas

Estaba mirando fijamente las agujas del reloj de la pared, pensando que hubiera sido divertido si pudiera volver atrás en el tiempo, para evitar la bronca. Había suspendido varias asignaturas, y no sabía cómo arreglarlo. Las notas estaban puestas,  y no le quedaba otra cosa que hacer que aceptar la discusión en casa. Encima, ¡era Navidad! Mientras le daba vueltas a todo eso, llamaron a la puerta. Entre el jaleo en el recibidor, escuchó la voz de su tío, y suspiró de alivio. “Menos mal”, pensó que con su visita la bronca se iba a aplazar. Por si acaso, escondió las notas. Ya había inventado la excusa para que no insistieran en que se sentara en la mesa festiva: calentó el termómetro en la llama de una vela, se comió una patata cruda y se quedó sin parpadear un rato largo, para que le lloraran los ojos. Después de haber preparado la falsa fiebre, se metió en la cama tapándose del todo. Cuando su madre le llamó, ya estaba tiritando. Ella miró el termómetro, sacudió la cabeza y le dio una pastilla. Daba vueltas por la habitación sacando jarabes, mientras que su bata se arrastraba por el suelo. Siguieron sus consejos de siempre y cuando se acabó el refunfuño y ella salió, el chico abrió indeciso los ojos: primero uno, y luego el otro. Tenía que ser prudente, por si alguien entraba a visitar “al moribundo”, oyó fuera la broma de su padre, y contuvo la respiración. “La batalla del siglo se atrasa”, se dijo a sí mismo. Poco a poco, sin darse cuenta, se dormía bajo el efecto de la patata cruda…

Sigue leyendo

narrativa_newsletterp

Rapunzuel, un cuento infantil de los hermanos Grimm

Había una vez una pareja que desde hacía mucho tiempo deseaba tener hijos. Aunque la espera fue larga, por fin sus sueños se hicieron realidad.

La futura madre miraba por la ventana las lechugas del huerto vecino. Se le hacía agua la boca nada más de pensar lo maravilloso que sería poder comerse una de esas lechugas.

Sin embargo, el huerto le pertenecía a una bruja y por eso nadie se atrevía a entrar en él. Pronto, la mujer ya no pensaba más que en esas lechugas, y por no querer comer otra cosa empezó a enfermarse. Su esposo, preocupado, resolvió entrar a escondidas en el huerto cuando cayera la noche, para coger algunas lechugas.

Sigue leyendo

narrativa_newsletterp

Cuento infantil: La pequeña cerillera

Conocemos este cuento de Hans Christian Andersen  con diversos nombres: «La pequeña cerillera», «La vendedora de fósforos», «La noche de Anita» o simplemente «La cerillera». Su título original (en danés) es Den lille Pige med Svovlstikkerne.

Aun siendo un cuento para niños, «La pequeña cerillera» es una historia triste que narra la adversidad de una niña que se dedica -con poca suerte- a vender fósforos la última noche del año. Ella siente hambre y frío, y en casa no le espera sino más frío y más hambre… y un padre cruel. 

Sigue leyendo

narrativa_newsletterp

Cuento infantil de Fernán Caballero: El pájaro de la verdad

Érase vez y vez un pescador muy pobre, que vivía en una chocita en la orilla de un río, muy claro, muy manso, aunque profundo, el que huyendo del sol y la bulla, se entraba por entre árboles, zarzas y cañaverales a escuchar a los pajaritos que le alegraban con sus cantos.

Un día que, metido en su lanchita, iba el pescador a echar sus redes, vio bajar pausadamente por la corriente una arquita de cristal. Bogole al encuentro, y ¡cuál no sería su asombro al ver en ella acostadas sobre algodones a dos criaturas recién nacidas, niño y niña, al parecer mellizos! Al pobre pescador le dio mucha lástima de ellas y se las llevó a su mujer, que a la sazón estaba criando.

Sigue leyendo

narrativa_newsletterp