
Cuento de Bertolt Brecht: Si los tiburones fueran hombres
–Si los tiburones fueran hombres –preguntó al señor K. la hija pequeña de su patrona–, ¿se portarían mejor con los pececitos?
–Claro que sí –respondió el señor K.–. Si los tiburones fueran hombres, harían construir en el mar cajas enormes para los pececitos, con toda clase de alimentos en su interior, tanto plantas como materias animales. Se preocuparían de que las cajas tuvieran siempre agua fresca y adoptarían todo tipo de medidas sanitarias. Si, por ejemplo, un pececito se lastimase una aleta, en seguida se la vendarían de modo que el pececito no se les muriera prematuramente a los tiburones.