Las nieves del Kilimanjaro | Relato de Ernest Hemingway

Las nieves del Kilimanjaro, Ernest Hemingway

El catre donde yacía el hombre estaba situado a la sombra de una ancha mimosa. Ahora dirigía su mirada hacia el resplandor de la llanura, mientras tres de las grandes aves se agazapaban en posición obscena y otras doce atravesaban el cielo, provocando fugaces sombras al pasar.
–No se han movido de allí desde que nos quedamos sin camión –dijo–. Hoy por primera vez han bajado al suelo. He observado que al principio volaban con precaución, como temiendo que quisiera cogerlas para mi despensa. Esto es muy divertido, ya que ocurrirá todo lo contrario.

Un canario como regalo (gran relato breve de Hemingway)

un canario como regalo, Hemingway, cuento

El tren pasó rápidamente junto a una larga casa de piedra roja con jardín, y, en él, cuatro gruesas palmeras, a la sombra de cada una de las cuales había una mesa. Al otro lado estaba el mar. El tren penetró en una hendidura cavada en la roca rojiza y la arcilla, y el mar sólo podía verse entonces interrumpidamente y muy abajo, contra las rocas.

–Lo compré en Palermo –dijo la dama norteamericana–. Sólo estuvimos en tierra una hora. Era un domingo por la mañana. El hombre quería que le pagara en dólares y le di un dólar y medio. En realidad canta admirablemente.

3 relatos cortos sobre la lluvia (Uslar Pietri, Hemingway, Maugham)

Somerset Maugham, relato, lluvia

3 relatos cortos sobre la lluvia, 3 relatos cortos protagonizados por matrimonios. El primero de ellos, “La lluvia”, del escritor venezolano Arturo Uslar Pietri, narra la historia de un matrimonio que lucha por sobrevivir de las faenas del campo, pese a que él no parece mostrar apenas coraje para sacar la hacienda adelante y pese a que la sequía amenaza con arruinar, una vez más, las cosechas.

Anecdotario literario

Gabriel García Márquez

“Estábamos en San Francisco con Mario (Vargas Llosa). Él me dijo que escribía de tal hora a tal hora, y ese tipo de cosas. Al final yo le dije: Mirá, lo que pasa es que vos tenés con la literatura relaciones conyugales. Para mí es una puta. Si viene, viene. Mario se sienta a escribir, y si no le salen bien las cosas, putea y sigue. Yo no. Yo me pararía, me iría a pasear, y volvería al otro día para ver si la cosa estaba a punto”.

Historia corta de Hemingway: La capital del mundo

Hermingay en Cuba, cuento, Madrid

Hay en Madrid infinidad de muchachos llamados Paco, diminutivo de Francisco. A propósito, un chiste de sabor madrileño dice que cierto padre fue a la capital y publicó el siguiente anuncio en las columnas personales de El Liberal: PACO, VEN A VERME AL HOTEL MONTAÑA EL MARTES A MEDIODÍA, ESTÁS PERDONADO, PAPÁ; después de lo cual fue menester llamar a un escuadrón de la Guardia Civil para dispersar a los ochocientos jóvenes que se habían creído aludidos. Pero este Paco, que trabajaba de mozo en la Pensión Luarca, no tenía padre que le perdonase ni ningún motivo para ser perdonado por él. Sus dos hermanas mayores eran camareras en la misma casa. Habían conseguido ese empleo simplemente por haber nacido en la misma aldea que otra ex camarera de la pensión, que con su asiduidad y honradez llenó de prestigio a su tierra natal y preparó buena acogida para la gente que de allí llegase. Dichas hermanas le habían costeado el viaje en ómnibus hasta Madrid y obtenido su actual ocupación de aprendiz de mozo. En la aldea de donde provenía, situada en alguna parte de Extremadura, imperaban condiciones de vida increíblemente primitivas, los alimentos escaseaban y las comodidades eran desconocidas, y tuvo que trabajar mucho desde muy pequeño.

Sigue leyendo

narrativa_newsletterp

Los mejores 1001 cuentos literarios de la Historia: La breve vida feliz de Francis Macomber

La breve vida feliz de Francis Macomber

El cineasta Werner Herzog alentaba a sus estudiantes de la Escuela de Cine de Rogue que leyeran mucho si querían ser directores de cine. Y aportaba una serie de lecturas obligadas que no deberían saltarse, entre las que estaban Las Geórgicas (el extenso poema de Virgilio), The Peregrine (una descripción de J. A Baker de la vida de los halcones peregrinos), El informe de la comisión Warren (que contiene los detalles de la investigación del asesinato de John F. Kennedy), Edda Poética (colección de poemas nórdicos), Historia verdadera de la conquista de la Nueva España (una «crónica de Indias» de Bernal Díaz del Castillo) que aporta información sobre la conquista de México en el siglo XVI. Y también «La breve vida feliz de Francis Macomber», un cuento muy largo de Ernest Hemingway que narra las peripecias de un matrimonio en un safari de caza en África. 

Sigue leyendo

narrativa_newsletterp

Relato corto de Ernest Hemingway: El mar cuenta

Fue Malcolm Cowley quien subrayó el gusto de Hemingway por una geo­gra­fía especial, sacralizada por el uso de bebidas especiales, armas especiales, formas especiales de hablar y de vivir. Los asuntos de sus historias dan casi todos para un reportaje, enfocados hacia situaciones de peligro o habilidad física o tensión moral: la guerra, el toreo, el boxeo, la caza, la pesca, la vida en familia. Una anodina anécdota de pescar truchas se justifica por la excitación del pescador, la tensión que lo consuela momentáneamente con «la sensación de haberlo dejado todo atrás, la necesidad de pensar, la necesidad de escribir, otras necesidades». El lector, de pronto, siguiendo lo que le están contando, se siente identificado con el pescador, a quien, por un rato, se le ha quitado de encima el peso de la propia existencia. Hemingway di­luía en sus cuentos los límites entre experiencia y fábula.

 Justo Navarro, “El escritor como hombre de acción”, Revista de Libros

Sigue leyendo

narrativa_newsletterp

París era una fiesta

París era una fiesta
Fuente de la imagen

París era una fiesta

Las democracias occidentales están muy lejos de banalizar el mal, como reprochaba Hannah Arendt a los nazis gregarios de la Alemania de los años 30, pero los recurrentes atentados terroristas cometidos en Europa han sentado las bases de otro vicio: el de la costumbre. Los terroristas podrán cambiar ciertos aspectos de su hoja de ruta, pero cuando tienen éxito ya sabemos lo que va a suceder a continuación: dolor e indignación, recuento precipitado de víctimas, declaraciones de los políticos criticando los atentados al tiempo que informan de inminentes represalias, cierres de fronteras, exposición de velas y flores para homenajear a las víctimas, defensa de las comunidades islámicas pacíficas o incitación al odio hacia ellas, interpretaciones del Imagine de John Lennon, rezos a Dios y al Diablo, entrevistas en los medios de comunicación a especialistas en la yihad, cruce de reproches entre miembros de partidos políticos… Tampoco faltan, cómo no, acusaciones a las democracias occidentales por parte de algunos ciudadanos occidentales que vienen a decir, con estas palabras u otras similares, que tenemos lo que nos merecemos.

Sigue leyendo

narrativa_newsletterp

Los mejores 1001 cuentos literarios de la Historia: Colinas como elefantes blancos

Rubén Abella, a quien entrevisté para charlar sobre su novela California (Menoscuarto, 2015), nos recomienda el cuento de Hemingway “Colinas como elefantes blancos”.

Cuento de Ernest Hemingway: Colinas como elefantes blancos

Del otro lado del valle del Ebro, las colinas eran largas y blancas. De este lado no había sombra ni árboles y la estación se alzaba al rayo del sol, entre dos líneas de rieles. Junto a la pared de la estación caía la sombra tibia del edificio y una cortina de cuentas de bambú colgaba en el vano de la puerta del bar, para que no entraran las moscas. El norteamericano y la muchacha que iba con él tomaron asiento en una mesa a la sombra, fuera del edificio. Hacía mucho calor y el expreso de Barcelona llegaría en cuarenta minutos. Se detenía dos minutos en este entronque y luego seguía hacia Madrid.

Sigue leyendo

narrativa_newsletterp

«El viejo y el mar», de Ernest Hemingway

El viejo y el mar

El viejo y el mar, de Ernest Hemingway

«Las opiniones de los críticos difieren con respecto a El viejo y el mar, que se aparta del estilo de las primeras novelas de Hemingway. Dentro de esta miniatura perfectamente construida se encuentran muchos de los temas que preocuparon a Hemingway como escritor y como hombre. La rutina diaria de un pueblo cubano de pescadores es evocada en las primeras páginas del libro con una economía del lenguaje característica. La desnuda existencia del pescador Santiago está narrada con un estilo austero y elemental que es tan elocuentemente desdeñoso como el encogimiento de hombros del viejo. Con la edad y la suerte en contra, Santiago sabe que debe remar «más lejos que los otros», lejos de la tierra, hasta las aguas profundas de la corriente del Golfo. Queda por interpretar una última tragedia, en un vacío ruedo de mar y cielo. 

Sigue leyendo

narrativa_newsletterp