[vc_row][vc_column][vc_column_text]

Conociendo a Florence
(Chesil Beach)
Ian McEwan
Fragmento
Ella también estaba inquieta en casa, una gran villa victoriana de estilo gótico, a la orilla de Banbury Road, a quince minutos andando. Su madre, Violet, corrigiendo exámenes finales todo aquel día de calor; era intolerante con los ejercicios cotidianos de Florence, sus reiterados arpegios y escalas, las prácticas de doble cuerda, los tests de memoria. “Chirridos”, era la palabra que Violet empleaba, como cuando decía: “Querida, todavía no he acabado. ¿Te importaría dejar los chirridos para después del té?