
APOLOGÍA DE LA VIOLENCIA
Francisco Rodríguez Criado
Mientras los suizos, tan responsables, tumban en las urnas la implantación del salario mínimo más alto del mundo, algunos españoles (demasiados) celebran en Twitter el asesinato de la presidenta de la Diputación de León Isabel Carrasco al tiempo que desean el asesinato de otros dirigentes del PP. Esta es la España que tenemos. El mero hecho de que debamos debatir si el enaltecimiento del asesinato es o no un delito penal da medida de lo lejos que estamos de ser una democracia civilizada. No todas las democracias lo son. No es lo mismo Suiza que España, un país que sigue dibujando bisontes en Altamira.